The Blackjaw – Burn The Artisan (2019)

El pasado octubre veía la luz, tras tres años de preparación, el nuevo álbum de The Blackjaw, «Burn The Artisan». En sus diez años de historia jamás habían ahondado tanto en el estilo de un disco; más que en el estilo, en la transmisión de lo que son capaces de hacer como músicos. El trabajo y ambición que hay tras estas composiciones da como fruto y recompensa un resultado admirable. Un ejemplo, no solo de lo que han conseguido con el disco sino con su propio esfuerzo, es el salto a compartir grandes escenarios como los del Resurrection Fest, Frank Carter & The Rattlesnakes, o recientemente en la sala Independence de Madrid con The Menzingers, cuya crónica de concierto podéis leer siguiendo el enlace.

El artwork de la carátula me parece simple pero impresionante ya que asemeja un grabado sobre un herrero, precioso y lleva directamente a lo que quieren representar, sin más. «Burn The Artisan» realmente es una obra de artesanos como todo trabajo de músicos que con esfuerzo saca adelante su propia labor. Quemar al artesano, ¿qué es quemar un artesano? Llegar cansado de trabajar, de algo que no te gusta hacer, pero sigues. Quemar el artesano es hacer algo que amas pero cada día te ponen más trabas para seguir en ello; «Burn The Artisan» es todo para lograrlo y ese todo para lograrlo comienza con una intro que llama la atención. Un pequeño rasgueo de guitarra sobre acordes simples, una voz clara y limpia y una pregunta «¿te has preguntado alguna vez cómo es matar a alguien?». Ellos sí….

En torno al hilo de la muerte continúan avanzando en «The Penitent» una canción que trata sobre los mineros que debían explotar las bolsas de gas y morían en la oscuridad. Musicalmente tiene un corte más rockero que se muestra sobre todo en el ritmo y esa inclusión de sonajas en la percusión. Las voces de este tema son simplemente espectaculares y me aventuro y no me equivoco si digo que va a ser lo mejor de «Burn The Artisan» por su frescura, por los coros que están bien introducidos y las llamadas de atención que se crean. Haciendo referencia de nuevo a trabajar en algo, o realizar algo que no quieres pero debes hacerlo, tenemos el siguiente track, «Sundown Skyline». Su sonido se me hace bastante similar al encontrado a principios de la década, un poco pop punk particularmente. Su línea melódica es bastante limpia, se entiende perfectamente tanto en voces como en guitarras, bajo y batería, pero sin olvidar la distorsión llevada al momento en que debe aparecer. Depende del momento del disco en el que te encuentres ese adjetivo asociado a punk va a variar de pop, rock a alternativo. En la siguiente canción, «At the Bottom of the Barrel», también encontramos estas mismas características con el añadido de unos coros con la voz femenina de Momo (Violets). Musicalmente también tiene unos detalles perfectamente introducidos que hace que sea un tema que recordar.

«Three On A Match» tiene un ritmo bastante más marcado, muy staccato en conjunto al principio, pero pronto se transforma en algo más ligado que permite disfrutar de la letra como una historia trágica en torno al mito de las tres cerillas en las trincheras de la Segunda Guerra Mundial. Por otra parte, me parece del todo impresionante el sonido del bajo en toda la canción. No tiene un dibujo ni unas técnicas que llamen la atención desmesurada, sin embargo da gusto poder oír como este instrumento se hace el hueco que merece y aporta emoción profunda. En general este hecho se aprecia en todo el álbum, aunque esta canción me ha marcado particularmente por ese detalle. A continuación, encontramos «Blood Workers» toda una oda al trabajador que lucha por subsistir en un mundo donde siempre se le culpa de todo el sustento económico. Su velocidad es elevada en comparación a las anteriores, también se aprecia ese ritmo marcado característico que en este caso solo es un plus hacia el movimiento del público, creo que como canción de directo es todo un acierto para mantener a los fans completamente activos y motivados. Con «AFAD» encontramos algo más de punk clásico, al menos con este título «All Fascists are Bastards» dedicado a todos aquellos altos cargos mundiales y no que se empeñan en hacer que nuestra evolución sea una involución en todos los sentidos. Como tal, al tocar esta canción se ve que lo disfrutan y que lo sienten en lo más profundo de su rabia. La voz rota y el golpe seco y agresivo de la batería son la marca que lleva a guitarra y bajo al extremo. Sin duda la canción anterior y ésta deberían ser un pack tanto por significados que podrían tener relación como por entusiasmo. En el puesto número ocho tenemos «Crossed» con un estribillo que fácilmente se queda en la cabeza. En general todo el track es bastante pegadizo, la canción es sencilla y tiene un puente muy llamativo. «Bodies» me ha hecho sonreír por su comienzo donde se escucha decir un «vámonos» grabado. La canción es directamente en acústico, es perfectamente imperfecta. Las voces se van de afinación y la guitarra suena cruda, es un sonido genial. No me esperaba para nada este guiño aquí, es justamente el efecto artesano que hacía falta por hacer referencia al nombre. Realmente me cuesta trabajo pasar ahora al resto de canciones, creo que esto sería un culmen perfecto del disco, pero continúan ofreciéndonos melodías. «Bad Vibes Only» puede llegar muy hondo en lo personal a mucha gente por el significado que oculta: las apariencias de que tienes que estar feliz pase lo que pase y seguir una filosofía Mr. Wonderful a veces sobrepasan, y lo único que necesitamos es pasar de todo, solo malas vibraciones, claro, ¿qué importa? De nuevo esta letra y significado podría ser hilado a la siguiente canción, «Tired Breath», donde se desarrolla un pequeño pensamiento sobre la depresión y cómo aun siendo consciente, no puedes seguir. Es bonito ver como cada día estos temas tienen más presencia sin tapujos. El disco concluye con la variación y desarrollo del motivo musical de la intro tanto instrumental como líricamente bajo el título de «Burn The Artisan». Me equivoqué al decir que «Bodies» sería un gran final, sin duda éste lo ha sido.

Sonia Jiménez Carrillo

The Blackjaw (Edu, Germán, Kala & Guille)

Lo mejor: «Pese a no ser un disco temático todas las canciones hablan sobre la mala suerte» decían ellos en una entrevista para Mondo Sonoro. Si seguís mis criticas habréis podido observar una manía mía y es que cada disco tenga sentido; bien, éste lo tiene sin necesidad de una temática o línea conductiva que guíe las canciones. ¡Bravo!

Lo peor: Veo como una pega bastante fuerte que actualmente no se pueda poner el adjetivo pop y que sea algo positivo. Varias de las canciones de este disco tienen ese toque pop punk y me parece un sonido realmente bueno, aunque parece que hay cierto estigma y que solo se debe poner punk rock. Rompámoslo porque el disco es lo mejor que han hecho hasta la fecha en todo.

The Blackjaw «Burn The Artisan» (White Russian Records / Incendiaria / Bartolini Records)

1. Intro 
2. The Penitent
3. Sundown Skyline 
4. At The Bottom Of The Barrel 
5. Three On A Match 
6. Blood Workers 
7. AFAB 
8. Crossed 
9. Bodies 
10. Bad Vibes Only 
11. Tired Breath 
12. Burn The Artisan