Qué gran noticia tener de vuelta al bueno de Mark Tremonti y su banda repartiendo estopa. Es uno de nuestros artistas favoritos y lo es por algo. Es una especie de Rey Midas que convierte en oro todo lo que toca. Se dio a conocer mundialmente como guitarrista de Creed, comenzando una leyenda que no hizo más que acrecentarse con Alter Bridge, y no contento con ello, hace ya una década creó su propia banda liderándola no solo con su guitarra, sino también con su voz y dándole por nombre su propio apellido. Pero que nadie se lleve a engaños, Tremonti no es un proyecto paralelo que el afamado guitar hero use como mero entretenimiento o vía de escape a ideas bizarras que no quepan en su proyecto principal. Tremonti es una banda hecha y derecha, de hecho el nivel mostrado, sobre todo en sus últimos trabajos de estudio, supera notablemente el de los publicados en la última década con la banda en la que Mark comparte protagonismo con Myles Kennedy, el cual por cierto, también ha publicado un disco en solitario este año. Con cuatro álbumes de estudio que aúnan de forma sorprendente y brillante el speed/thrash metal de los 80′ con el rock moderno basado en el groove, y cada uno de ellos subiendo la apuesta, es inevitable estar expectante ante su quinta referencia discográfica. «Marching In Time» no defrauda y representa una colección de himnos pesados, acelerados y melódicamente espléndidos. Al igual que con su predecesor «A Dying Machine», este paquete de doce cortes sale a la venta a través de Napalm Records, y pese a no ser tan agresivo como los publicados por la mayoría de las bandas con las que comparten sello, pocos podrán negar que los riffs que despliegan aquí tienen una capacidad aplastante para volar cabezas y eliminar prejuicios de una tacada.
«A World Away» es el tema de apertura y comienza como una ametralladora. Tremendamente pesado en su riff inicial hasta llegar a un estribillo pegadizo que se desenvuelve en una línea más alternativa, dualidad que lo convierte en un auténtico temazo de metal contemporáneo, aderezado con un puente y un solo realmente mágicos. Un tema irresistible que de alguna manera establece el tono para lo que vendrá después. Si hay algo que Mark Tremonti siempre ha hecho bien a lo largo de toda su carrera musical es escribir exactamente este tipo de grandes himnos, y en ese saco podríamos meter cortes como «If Not For You» (su primer single, publicado a finales de julio, en el que cuenta con arreglos electrónicos de inicio sobre los que se suma la voz de Mark y su guitarra hasta que sin hacerse mucho de rogar se suman todos sus compañeros para dar rienda suelta a ese rock metalizado marca de la casa que gana en intensidad a medida que va avanzando el tema), el enérgico «Now And Forever», un «Thrown Further» dominado por la velocidad y el groove, el demoledor y adictivo «Let That Be Us» (uno de los hitos del álbum) o «Would You Kill». Sin embargo, no todo es tan implacablemente pesado, como lo demuestran varias pistas repartidas a lo largo de la segunda mitad del álbum. La poderosa balada «The Last One Of Us» en la que las guitarras limpias llevan la tónica y cuya tensión aumenta gradualmente hasta culminar con un solo de guitarra con denominación de origen es una de las más destacadas. Tampoco le van a la zaga «Not Afraid To Lose» y «Bleak». Y a medio camino estaría «In One Piece», una canción muy dinámica y pegadiza con esos cortes pre-estribillo como punto diferencial, y «Under The Sun», marcada por una muy buena cadencia que la convierte en un medio tiempo épico de manual. El momento de inclinación más progresiva del disco llega con el tema homónimo que sirve un cierre. Con siete minutos y medio de duración estructurados en varias secciones diferentes, esta carta abierta a los hijos del cantante y guitarrista que es «Marching In Time» alterna estilísticamente entre una balada y un himno de rock edificante. Podría ser el «Blackbird» particular de este disco, aunque sin llegar a las cotas de genialidad de aquel, todo sea dicho.
En definitiva, tenemos en este «Marching In Time» otro gran disco del catálogo de Tremonti, lo cual no debería sorprender a nadie familiarizado con su trabajo. Aquí se desprenden de la piel totalmente conceptual de su predecesor en favor de una composición de canciones individualizada, pero de lo que no se desprenden es de la variedad de movimientos musicales brillantes, tanto de temas pesados, que son los dominantes, como de los medios tiempos que elevan el nivel del álbum. Un festín de riffs y de himnos que a lo largo de una hora (una duración quizá excesiva) deleitará tanto a sus fans más exigentes como a nuevos oyentes que busquen un sonido metal refrescante y poderoso.
Lo mejor: Uno de sus mejores discos, combinando sus característicos elementos con algunos aspectos nuevos y geniales. Si bien no se puede decir que supere a su predecesor, al menos mantiene el nivel y eso son palabras mayores.
Lo peor: Corren el riesgo de que su sonido se vuelva demasiado predecible.
1. A World Away
2. Now And Forever
3. If Not For You
4. Thrown Further
5. Let That Be Us
6. The Last One Of Us
7. In One Piece
8. Under The Sun
9. Not Afraid To Lose
10. Bleak
11. Would You Kill
12. Marching In Time
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