¿Recordamos? volvemos al 2007

Echamos la vista atrás, tampoco muy atrás, tan solo diez años… Todos tenemos discos que llegan a nuestras manos (o a nuestros discos duros, hoy en día) y devoramos, convirtiéndose en nuestros discos favoritos durante una buena temporada. Semanas, meses, ¿años? esos ya son pocos… ¿y cuántos siguen estando entre nuestros favoritos 10 años después de que lleguen a nuestro poder? pues de eso va este especial, de discos que han pasado la prueba del tiempo. Álbumes que, como el buen vino, han sabido envejecer y disfrutamos escuchando como el primer día. 

Ésta es una lista personal, cada uno tendrá los suyos, pero sirve para orientaros sobre la línea que vamos a mantener en esta gloriosa web que acabamos de fundar. Se recomiendan buenos altavoces o en su defecto buenos auriculares, y sobre todo, buen gusto musical…

ALTER BRIDGE – Blackbird

“Blackbird” es el segundo disco de la superbanda de Orlando formada por las ¾ partes (la base instrumental) de Creed y el cantante, guitarrista y compositor Myles Kennedy. Es, quizá, su álbum más completo y el que les lanzó al estrellato de forma definitiva. Canciones como la enérgica “Rise Today”, la épica “Blackbird” y la preciosista “Watch Over You” dan fe de por qué Alter Bridge son una referencia en el hard-rock y el metal actual.

BIFFY CLYRO – Puzzle 

“Puzzle” es la obra cumbre de los escoceses. Ahora son un grupo acomodado en el mainstream pero esa posición de privilegio se la deben a este álbum. La banda de Simon Neil y los hermanos Johnston ya había sacado al mercado 3 discos anteriormente, pero fue “Puzzle” el que los puso en el mapa del rock alternativo a nivel mundial. Sus ritmos frenéticos con estribillos más pegadizos que en sus obras anteriores y sus atmósferas cercanas al post-hardcore alcanzaron su culmen con este disco y con canciones como “Who’s Got A Match” o “Folding Stars”. Sublime. El nivel creativo no hizo más que decrecer desde entonces.

CHEVELLE – Vena Sera

“Vena Sera” es el cuarto álbum de los de Chicago. Tenían el listón alto después de su predecesor “This Type of Thinking (Could Do Us In)” pero superaron el desafío con nota. No era fácil ya que además tenían que superar la salida de la banda de su carismático bajista Joe Loeffler. Dean Bernardini lo suplió a la perfección y el primer disco en el que Chevelle no era una banda de tres hermanos fue un éxito de crítica. La potencia de la base rítmica y la técnica vocal de Pete Loeffer siempre los ha hecho destacar sobre el resto de bandas de metal alternativo. Todos los temas son singles potenciales pero yo destacaría “Antisaint” y “I Get It” sobre el resto.

HIM – Venus Doom

Ayyy HIM. ¡Cómo me gustaba esta banda! Siempre ha estado entre mis favoritas. Lamentablemente los finlandeses siempre han sido un poco irregulares en cuanto a la calidad de sus lanzamientos. “Venus Doom” es el sexto álbum de la banda de Ville Valo y, en mi modesta opinión, el último gran disco de HIM. Sus lanzamientos posteriores me parecen irrelevantes, olvidando casi por completo la esencia de su característico sonido bautizado como “love metal”, y que en “Venus Doom” se muestra en todo su esplendor: riffs pesados, atmósferas lúgubres, guitarras cristalinas y letras románticas marca de la casa.

NOTHINK – Spotlights

“Spotlights” es el segundo disco de Nothink. Grabado en los estudios Ultramarinos Costa Brava, con la producción de Santi García, los madrileños contaron con colaboraciones de lujo, como la orquestación en varios temas por parte de la Filarmónica de Kiev. Con ello pretendían darle un aire grandilocuente al que tenía que ser su álbum de consagración, y lo consiguieron. Para muchos, “Spotlights” puede ser un disco pretencioso pero es que la ambición y la experimentación es algo que no se puede separar de Juan Blas y su banda. El post-hardcore y el rock alternativo patrio tenían en Nothink a sus nuevos héroes pero pocos años después y con tan solo tres discos en el mercado decidieron separarse.

SEETHER – Finding Beauty In Negative Spaces

A finales de 2007 salió a la luz “Finding Beauty In Negative Spaces”. Es difícil destacar un disco de Seether entre su excelsa discografía pero sin duda éste debería estar en el pódium. Los sudafricanos asentados en Estados Unidos son una referencia dentro del post-grunge y el rock alternativo. Siempre han sabido cómo tocar la fibra y en este álbum las emociones están más a flor de piel que nunca. “Like Suicide” iba a ser el primer single pero tras el suicidio del hermano de Shaun Morgan (cantante, compositor y líder de la banda) no parecía lo más oportuno. No obstante, la desgracia inspiró “Rise Above This”, una canción en su memoria que muestra todas las virtudes compositivas de Seether. Sin desperdicio.

SIXX: A.M. – The Heroin Diaries Soundtrack

“The Heroin Diaries Soundtrack” es el álbum debut de la superbanda formada por el bajista de Mötley Crüe, Nikki Sixx, el vocalista James Michael y el que fuera guitarrista de Guns N’ Rosses, DJ Ashba. Diseñado para ser un acompañamiento de la autobiografía de Nikki Sixx “The Heroin Diaries: A Year in the Life of a Shattered Rock Star” en la que relataba sus experiencias con la heroína, el disco es un auténtico pepino. Inspirado, emotivo y muy visceral. El medio tiempo “Accidents Can Happen” pone la piel de gallina, “Life Is Beautiful” es un canto a la esperanza, su single “Pray For Me” es un nuevo himno… En definitiva, un disco que se desmarca del sonido de su banda principal y que lo coloca entre los imprescindibles del  hard rock y el rock alternativo del nuevo milenio.

SKIZOO – Incerteza

Skizoo fue una superbanda a la española que tan solo se mantuvo en activo 4 años, eso sí, muy bien aprovechados. En febrero de 2007 publicaron “Incerteza”, su segundo disco y el más redondo de los tres que tienen. Los cambios de formación fueron constantes en la base rítmica pero la esencia de Skizoo se basaba en las guitarras de Jorge Escobedo y Antonio Bernardini (guitarristas de Sôber) y en la voz y las letras del prolífico Morti. El sonido es una continuación de su primer disco homónimo, pero un poco más duro y a la vez más pulcro. “No me dejes solo” o “Dame Aire” son una muestra de la parte más directa y potente de los madrileños, mientras que destacaría “Algún Día” como representante de la parte más emotiva.

SKUNK D.F. – Esencia

“Esencia” es el quinto álbum de Skunk D.F. y el más inspirado de la banda madrileña.  Grabado, mezclado y masterizado por Alberto Seara en Cube Estudios, el toque de éste se deja notar en “Esencia” ya que el aurea que impregna los trabajos de Sôber lo tiene este disco que redefine su estilo, ahondando en ese metal alternativo y melódico más próximo a “El Año Del Dragón” (2005) que a sus anteriores trabajos. La particular voz de Germán González y sus emotivas letras, más introspectivas de lo que nos tenían acostumbrados hasta ese momento, alcanzan su culmen en temas como “Eternidad”, “Espantapájaros” o “Lucha Interior”, si bien, prácticamente todas las canciones de “Esencia” deberían figurar entre las mejores del metal en español.

THRICE – The Alchemy Index Vols. I And II (Fire And Water) 

Hace diez años que descubrí a Thrice, y lo hice con este disco, por lo que le tengo un cariño especial. Personalmente, me gusta más el “The Alchemy Index Vols. III And IV (Earth and Air)” de 2008, pero esta primera entrega de la epopéyica obra conceptual dedicada a los cuatro elementos titulada “The Alchemy Index” tiene su miga. La música pesada con guitarras distorsionadas, prominentes líneas de bajo y frecuentes cambios de tiempo ya hacían de Thrice una reconocida banda en la escena hardcore pero la inclusión de elementos electrónicos y más partes limpias en sus estructuras les hacen dar un salto cualitativo, evolucionando hacía el post-hardcore y el rock alternativo del que han sido una de las mayores referencias a nivel mundial desde entonces.